CICLO ICONOGRAFICO DEL SIGLO XVIII
BASILICA DE LA VEGA UN CICLO ICONOGRAFICO DEL SIGLO XVIII
(Aludimos en esta sección, al trabajo de investigación llevado acabo por la historiadora Paloma Sanchez Portillo, publicado en la Revista Berceo del IER de la Rioja en 2002, en el que presenta una interesantisima relación entre la iconografia de la basilica y la exaltación de la Virgen, madre de Dios).
Este templo dedicado a la Vrgen de la Vega, que encontramos documentado desde el siglo XI, sufrió diferentes remodelaciones a lo largo de su historia, en especial durante los siglos XVII y XVIII, cuando el edificio adquiere prácticamente el aspecto actual.En las páginas siguientes nos ocuparemos de la basílica desde un aspecto muy concreto: el del mensaje iconográfico de sus elementos decorativos; obviamente no incluiremos en el mismo los retablos laterales, pues no forman parte de dicho mensaje sino que responden a razones de índole devocional de los propietarios de las capillas donde se ubicaban en un principio, estando dedicados a San Pedro,Santa Ana, San Antonio y San José.
Por tanto, el presente estudio iconográfico se refiere fundamentalmente : alaltar mayor, a los colaterales y a las pinturas murales si bien, en algún momento. aremos alusión a otros elementos decorativos de carácter secundario.
Por regla general se suele trazar una línea argumental que conduzca a una conclusión. Sin embargo, hemos preferido recorrer el camino en la dirección contraria: entendemos que la decoración principal de la basílica de Nuestra Señora: responde a un mensaje común, la glorificación de la Virgen María, algo totalmente lógico tratándose de un santuario mariano.
Una vez expuesto el meotivo que sirve de nexo a todo el ciclo iconográfico, veamos de qué forma está dispuesto, cuales son los elementos de que consta y cuáles los motivos por los que aparecen.
Por supuesto, debemos partir de la imagen de Ntra. Señora de la Vega pues Ella es quien da sentido al edificio y todo lo que conlleva, como a nuestro trabajo. Como titular, ocupa el lugar de honor en el retablo mayor: la hornacina central del cuerpo principal.
La imagen, una talla de madera del madera del siglo XIV responde al tipo de Virgen sedente, con el Niño en sus rodillas y un fruto en la mano diestra, iconografia frecuente en las imágenes goticas por el paralelismo que se establece entre Eva por cuyo fruto llegó el pecado y la Virgen, por cuyo fruto llego la Redención. Aunque lo que hoy vemos es una granada, atributo de su advocación, al parecer lo que sostiene la talla una manzana que posteriormente se recubrió con una granada. Tambien en su mano diestra sostiene unas espigas igualmente añadidas y que, aparte de su simbologia eucaristica, aquí hacen referencia a uno de los milagros que se le atribuyen: ante la plegaria de una mujer que no tenía con qué alimentar la Virgen hizo que unas espigas de cebada dieran granos de trigo. Por último aparece adornada con un rosario, obra reciente. Aunque las imágenes antiguas que se conservan de la Virgen de la Vega (estampas del siglo XVIII) la presentan con un rosario en la mano, la talla original no lo tendría pues la tradición atribuye a santo Domingo (siglo XIII) la institución del rezo del rosario que adquiere una mayor difusión a partir de la bula promulgada por Clemente VIII en 1593, siendo los ejemplos más antiguos conservados de finales del siglo XV .
No Obstante, hemos creído conveniente subrayar este elemento ya que, como mas adelante veremos, en la decoración del templo aparecen mÚltiples referencias al rezodel rosario.
Flanqueando a la Virgen, en sendas hornacinas del retablo (realizado por :Santiago del Amo y dorado por José Bravo y Fernando de Sagredo entre 1741 y 1742) se encuentran las tallas de sus padres, san Joaquín y santa Ana, obra de ManuelRomero (1742).
En cuanto al resto de asuntos que vemos en el templo (pinturas, esculturas o relieves) van a girar en torno a la figura de María, para su mayor gloria. No debemos olvidar que el barroco es el arte de la Contrarreforma y que es en este periodo el culto a María alcanza mayor fuerza, por la pugna mantenida con los protestantes. Uno de los temas que se defenderán con mayor firmeza fue el de su Inmaculda Concepción, aunque sin llegar a adoptar ninguna resolución. En 1708 se declara Festividad y creencia obligatoria para toda la iglesia, alcanzando la categoria de dogma, por la encíclica Ineffabilis Deus de Pío IX (8 de diciembre de 1854).
A pesar de que la declaración del dogma no se hiciera hasta dicha fecha, fue levoción en siglos anteriores, sobre todo a partir de la bula de Alejandro VII por la que se potencia su culto (1661) y en España desde 1644 cuando se establece como fiesta de precepto. En este sentido, queremos apuntar que - aparte de la pintura de la Inmaculada que se conserva en el testero, cubierta por el retablo- en la portada del edificio aparece una imagen de esta advocación y que entre los adornos con que durante durante muchos años se nos mostraba la Virgen de la Vega aparece un creciente lunar, elemento claramente alusivo a su Inmaculada Concepción (por la asociación que se hace con Sulamita, del Cantar de los Cantares). Igualmente, en la decoración del edificio se alude al tema de la Virgen como vencedora del demonio. Por otro lado no podemos dejar de recoger el que Angel Casimiro de Govantes, al hablar de este Santuario afirme que está "dedicado al misterio de la natividad de Nuestra"
DESCRIPCION DE LOS ELEMENTOS ARTISTICOS DE LA BASILICA
LA BASILICA Y SUS PINTURAS
Magnífico video realizado para la página de Rioja-Cultura del Gobierno de la Rioja con motivo de la restauración de las pinturas murales de la Basílica y que la muestran en preciosas vistas panorámicas que destacan toda su grandeza y belleza.
PLANTA DE LA BASILICA DE NUESTRA SEÑORA DE LA VEGA DE HARO
En ella aparecen nunerados los diferentes elementos artísticos mas destacables, tanto de la iglesia como de la sacristia. A continuación pasamos a describir estos segun su numeracion y letras.
IGLESIA>
1. Cristo Crucificado. tamaño natural. donación de Dña. Dolores Paternina. S. XIX.
2 Y 3. Pinturas sobre lienzo. Pinturas sobre lienzo de la presentación de Jesús en el Templo y
presentación de María en el Templo. obras de Sebastián Gallardo y Manuel Mallén. de 1782.
4. Altar de Santa Ana. Retablo e imágenes de estilo rococó de a mediados del S. VXIII. Imagen
titular de Santa Ana.
5. Altar de San Antonio de Padua. Retablo e imágenes de estilo rococó de a mediados del S. XVIII.
Imagen titular de San Antonio de Padua.
6. Altar de San Pedro Apóstol. Retablo e imágenes de estilo rococó de a mediados del S. XVIII.
Imagen titular de San Pedro Apóstol.
7. Altar de San José. Retablo e imágenes de estilo rococó de a mediados del X. XVIII. Imagen titular
de San José.
8. Escudo de armas y lápida perteneciente al enterramiento de Don Pedro Navarro Gareca.muerto en 1673.
9. Escudo de la ciudad. construído en marquetería por un carpintero de Haro a comienzos de este siglo.
Consta de 365 piezas.
10. Altar de la Adoración de los Reyes Magos. El retablo es obra de Santiago de Lama en 1734:
Fernando López Sagredo fue el dorador en 1735: las pinturas sobre lienzo, son obra de José del Valle
de 1735 y representan la Adoración de los Reyes Magos y la Visitación de María a Isabel. 11. Altar
de la Natividad del Señor. Las mismas fechas y datos que su paralelo de la Adoración, representando
éste la Natividad del Señor y los Desposorios de la Virgen y San José.
12. Retablo Mayor. Obra de Santiago de Lamo, vecino de Haro, realizada en 1740 y dorado por José Bravo
y Fernando López Sagredo en 1742.
- Virgen de la Vega, titular, talla gótica de madera policromada del S. XIV.
- San Joaquín y Santa Ana, obra de Manuel Lomero. natural de Burgos, realizada en 1740.
- Sagrario en templete obra de Juan de Nagrete, carpintero de la ciudad, realizada en 1710.
(Resto del retablo anterior).
- Espíritu Santo y Gloria obra del maestro escultor Andrés de Solide, natural de Santo Domingo de La Calzada, realizada en 1740 .
- San José. San Antonio de Padua, dos Angeles y dos Virtudes, obras probables de Andrés de Solide
y José Calvo de Zúñiga, realizadas en 1740.
A.) Pinturas en la bóveda (coro). Advocaciones Lauretanas de la Virgen, obra de Cristóbal de Villanueva
realizada en 1838.
B) . Gloria en la cúpula. Glorificación de María con Apostolado y Santos locales (aparecen
San Vicente, Santo Domingo de La Calzada, San Lorenzo, etcJ. Obra de Francisco de Plano,
aragonés, realizada en 1727.
C. Tambor y crucero. Pinturas realizadas por Francisco de Zorrilla, pintor real, en 174
- Ocho Ángeles en Tambor con Letanía.
- Crucero izquierdo: San Ambrosio, San Gregorio,
- Virtud de la Prudencia y Virtud de la Templanza.
- Crucero derecho: San Agustín, San Jerónimo, virtud de la Fortaleza y Virtud de la Justicia.
- La greca de escultura en piedra es obra de Francisco de Aguero en 1704.
D. Lienzos en las pechinas. Los cuatro Evangelistas, obra de José de Rice (o Ricerey), de San Vicente de la Sonsierra, realizada en 1710. Los marcos son de Juan de Negrete, dorados por Pedro Ibarrola en el mismo año.
SACRISTIA
E. Cúpula.
Cuatro escenas de la vida de la Virgen: Nacimiento de María, Presentación en el Templo, Visitación a Isabel y Anunciación. Cuatro mujeres del Antiguo Testamento: Judit. Ruth, Abigail y Yael. Y perspectiva. Todo ello de Francisco de Zorrilla. realizado en 1742 ..
13. Aguamanil.
- Aguamanil. decoración de capiteles y greca, obra del maestro escultor Francisco de Aguero realizada en 1704-1705. -Pintura sobre lienzo de Piedad y Jesús ante Anás, barrocas del Siglo .XVIII.
14. Tres pinturas, sobre lienzo, de Evangelistas, Santos Padres y Cena de Emaús, de escuela italiana de primera mitad del S. XVII.
- Tres pinturas, sobre cobre, de busto de Cristo, de María y Calvario, posibles venecianos del S. XVI.
15. Pintura sobre lienzo de busto de Cristo y Dolorosa. tenebristas de escuela italiana de comienzos del S. XVII.
- Dos relicarios y lámina de la Virgen de la Vega.
- Pintura sobre tabla. con incrustaciones de nácar, de San Jerónimo, obra barroca del S. XVII.
- Crucifijo, repintado, romanista de comienzo del S. XVII. 16. Tres lienzos representando: el Becerro de oro, el sacrificio de Isaac y Moisés con las Tablas de la Ley, de escuela italiana de 1ª a mitad del S. XVII.
- Pinturas sobre cobre de Adoración de los Reyes Magos y Anunciación. posibles venecianos del S. XVI.
17. Altar de San Roque.
- Retablito obra de Juan Ruiz, Tomás Martínez y Lesmes de Santa María, realizado en 1740-1741.
- San Blas. Barroca del S. XVIII
- San Roque, talla en madera policromada protorenacentista de fines del siglo XV o principios de XVI
FABRICA DE LA BASILICA
LA FABRICA DE LA BASILICA DE LA VEGA
Son varias las razones por las que las fábricas de las iglesias van cambiando con el tiempo.
Unas por ser recintos reducidos, incapaces de recibir a los fieles; otras por seguir los nuevos estilos; otras por ruina de los anteriores edificios. Este último parece ser el caso de Nuestra Señora de la Vega.
Los últimos años del S. XVII registran frecuentes deterioros en la basílica. Los trabajos de carpinteros y albañiles se suceden contínuamente en tejados, sobre todo, y mantenimiento en general, hasta que en 1703 la Parroquia de Santo Tomás, el Ayuntamiento y la propia Basílica encargan a Bernardo de Munilla y Juan de Villanueva, vecinos de Viana y San Millán, respectivamente, que hagan una traza completa y nueva para el futuro templo.
Las obras salen a concurso en el mismo año; Pedro de Olaechéa, Ignacio de Ezcurra y Pedro de Elejalde (a veces nombrado como Lejalde), son elegidos para levantar los muros y paredes de piedra. ayudados en lo decorativo por el maestro escultor Francisco de AgUero, autor de las mejoras en escultura que se encuentran dentro del templo, en la Capilla Mayor y en la sacristía. El contrato de la obra asciende a la cantidad inicial de 12.500 reales de vellón y se firma siendo Capellán Don Manuel de Zava1I0s y Beneficiado Don Félix de Rojas , quien es comisionado para gestionar en Calahorra el permiso para la misma. Sin embargo, Pedro de Elejalde no acabará su contrato ya que en 1 706 marchará a su pueblo natal por encontrarse enfermo.
Los trabajos encomendados a estos tres maestros canteros concluyen en 1708, fecha en la que Manuel de Oléa completa la traza de Munilla y Villanueva con la distribución y obra de los tejados, que durará dos años más. El maestro albañil será en esta nueva etapa Miguel de Anguiozar con la ayuda de Nicolás de Aguirre, vecino de San Vicente, Juan de Vellojín Sedano, maestro herrero, y Juan Negrete, como carpintero.
En 1710 el mismo Oléa traza la cúpula, o media naranja; con ello finaliza la fábrica de la Basílica. en 1711. La lleva a cabo Miguel de Angiozar ayudado esta vez por el herrero Bias del Val y los maestros ladrilladores José de Alday, Diego de Retes y José de Urdiola, este último maestro en yeserías. Sin embargo esta no es la cúpula que hoy podemos contemplar ya que, al parecer, el excesivo peso de la misma hacía fallar su base, los arcos torales, lo que motivó su reconstrucción y remodelación completa, esta vez proyectada y realizada por Agustín Ruiz de Azcárraga en 1731. La anterior tenía en su proyecto 29 bolas de cobre, además de un chapitel, mientras que la actual ha quedado reducida en tamaño y peso, con sólo 9 bolas y chapitel. en su exterior. Hace la obra el maestro Pedro Arecha Amezaga, vecino de Mena-Garai; el carpintero: Juan de la Torre, yerno de Negrete.
Pero no todo es nuevo a partir de 1703. Algunos restos quedaron de construcciones anteriores cuales son la casa del Capellán, proyectada por Juan de Raón, la torre •de la antigua iglesia y un pequeño coro adosado a la pared que linda con la casa. La torre se derriba en 1759 dando paso a la espadaña actual, construída por Bautista Múgica. y, por fin, en 1775 se construye el coro por el maestro Manuel Gorbéa, que deja la obra tal y como hoy la podemos contemplar.
HISTORIA, TRADICIONES Y LEYENDAS DE LA VIRGEN DE LA VEGA
LEYENDAS Y TRADICIONES
Muy escasas son las noticias que de la milagrosa imagen de la virgen de la Vega tenemos hasta el siglo XVII y XVIII, en que las diferentes fases de la construcción de la actual basílica deja abundantes detalles a través de los libros de fábrica y las cuentas que rinde la Cofradía y los encargados de financiar su construcción. Hasta ese momento la escasez de datos históricos contrastados , bien por falta de una investigación seria y profunda o bien por su inexistencia real, han hecho florecer algunas leyendas y tradiciones sin ninguna base rigurosa, que no obstante, se han ido distribuyendo entre las gentes y los panfletos informativos como hechos reales, toda vez que los mismos historiadores recogen estas tradiciones ante la necesidad de dar un porqué y un como a la contrastada devoción que desde el siglo XVII se profesa en la ciudad de Haro y su comarca, a la imagen de Ntra. Sra. la Virgen e la Vega.
Pero sin duda la tradición más conocida y divulgada de la imagen de Ntra. Sra. de la Vega es la leyenda Granadina. Esta, tal como la tradición la ha ido trasmitiendo, vendría a ser la siguiente: Tras la invasión de la península ibérica por los musulmanes, a raíz de la derrota del rey Don Rodrigo en la tristemente famosa batalla de Guadalete, el año 711; un grupo de cristianos que vivían en las fértiles vegas de Granada, se vieron obligados a huir dejando abandonadas sus tierras. En su huida llevaron consigo su más importante tesoro, una milagrosa imagen de la virgen que veneraban desde hacia tiempo y que no podían permitir que cayera en manos de los infieles invasores. Transportaron su imagen hacia el norte hasta llegar a las orillas del río Ebro en su confluencia con el cauce del Oja-tirón, muy cerca del emplazamiento de la actual ciudad del Haro, que aun no existía como tal. Allí escondieron su imagen, en las tierras de aquella rica vega que tanto les recordaba al lugar de donde procedían. Muchos años después, tras la reconquista de las tierras riojanas y el asentamiento de poblaciones cristianas en sus tierras, unos hortelanos que habían plantado su huerta en aquél lugar descubrieron la imagen, que se les apareció en un cebollar de su propiedad. Esta aparición supuso un acontecimiento para los habitantes de aquellas tierras que se aprestaron a construir una modesta ermita donde venerar aquella imagen tan milagrosamente aparecida.
Pasó el tiempo y arraigó la devoción de los lugareños por aquella imagen, pero los granadinos, enterados del hallazgo regresaron para recuperar a su virgen, aduciendo sus legítimos derechos sobre ella. Los riojanos, ante las evidencias aportadas, con gran tristeza en su corazón, tuvieron que entregar aquella imagen a la que tanto querían y que tanto bien les había reportado. Usaron los de Granada unos bueyes para su transporte resultando que al llegar a las lindes de aquellas tierras los anímales paraban y no había forma de hacerlos continuar, intentaron a la desesperada aquellos hombres dar vuelta a los bueyes para regresar a la ermita que habían dejado atrás y comprobaron con asombro que los animales tomaban mansamente y con decisión la vía de regreso. Intentaron de nuevo llevarse a la virgen por el mismo método he hicieron, esta vez, un largo camino, hasta llegar a una posada donde se quedaron a pasar la noche. Al amanecer, comprobaron con asombro que los bueyes junto con su preciosa carga habían desaparecido. No fue tanta su sorpresa al comprobar que los bueyes habían regresado, sin que nadie les condujera, a la modesta ermita de la Vega. Por fin comprendieron que era la mismísima Madre de Dios la que por este prodigio les estaba indicando que quería que aquella imagen se quedara esa ermita, para su veneración por los lugareños y sus futuras generaciones, y así lo hicieron, con hareto dolor de su corazón abandonaron su pretensiones y dejaron en la vega de Haro su venerada imagen.
Hasta aquí la leyenda-tradición conservada en el tiempo y que como otras muchas de vírgenes aparecidas de aquella época recoge conocidos lugares comunes conducentes a expresar la milagrosa unión de una imagen y su pueblo. Esta bonita historia recogida incluso por los historiadores más reputados de la región, como D. Domingo Hergueta,, ha pasado de boca en boca convirtiéndose en un hecho aceptado por el pueblo jarrero, que con esta copla, convertida en conocida jotilla, que todo riojalteño conoce y canta, ha propagado en el tiempo el sentir de las gentes hacia la Virgen de la Vega de Haro.
Una primera leyenda, claramente errónea, citada por el padre F. Anguiano, sitúa a la imagen de la Virgen de la Vega entre las más antiguas de España, especulando que fue repartida con otras, por los apóstoles Santiago y San Pablo, en sus respectivas visitas a la península ibérica, a principios del cristianismo. Entendemos que al referirse a esta imagen se referiría el padre Anguiano a la primitiva imagen de la tradición granadina, pues la actual es claramente una imagen gótica del siglo XIV. En cualquier caso es imposible que los Santos Apóstoles referidos, pudieran haber traído imágenes de Ntra. Sra. ya que en los primeros siglos del cristianismo no se rendía culto ni a las imágenes ni a las personas, solo a la Santísima Trinidad, no existiendo de esa época imagen alguna.
Quien te trajo a ser riojana
Virgen de la Vega de Haro
Quien te trajo a ser riojana
Siendo de Granada bella
Tu patria a ti te reclama.
Cabe la posibilidad de que esta tradición antiquísima, se hubiera ido transmitiendo de boca en boca y de generación en generación a través primero de los habitantes del primitivo poblado de “La Vega” y de los de la Villa de Haro después, ya que no existe ningún documento fiable al respecto. Pero algunos historiadores apuntan a la posibilidad de que dicha leyenda se forjara a partir del hecho constatado de que la imagen, cuando esta revestida de sus mantos, lleva una granada en su mano. Siendo esto muy poco habitual en estas imágenes y siendo la granada un fruto de escasa tradición en nuestra zona; la gente debió preguntarse el ¿Por qué? de este símbolo en su mano, surgiendo, de la necesidad de una respuesta coherente, la leyenda que antes hemos narrado. Sin embargo es un hecho que la imagen de la Virgen de la Vega, tal y como se talló en el siglo XIV, lleva una manzana en la mano, símbolo éste que sí es más habitual en el tipo de imágenes de la época y que representa a la nueva Eva, que al contrario de lo ocurrido con la primera, que por una manzana trajo la perdición al mundo, la nueva Eva, por el fruto de su vientre traerá la salvación al genero humano. Así pues la famosa granada es un aditamento que se le colocó a la Virgen cuando se la vistió, por primera vez, superponiéndola a la manzana original. Teniendo en cuenta que esta moda comenzó a practicarse con asiduidad a partir del siglo XV y que los jarreros habían participado activamente en la conquista de Granada (1942), a las ordenes del Conde de Haro, y que habían obtenido mención y favores por parte de la casa real, algunos historiadores han querido ver este ornamento relacionado con eses privilegios obtenidos por la participación en la reconquista de granada, que hubieran reflejado añadiéndolo la granada al ajuar de la Vega.
NOTICIAS HISTORICAS
Las primeras noticias históricas que tenemos corresponden a un legajo fechado en 1063 en donde aparece nombrada la iglesia de "Santa María de Abeka" (actual Basílica de Nuestra Señora de la Vega) en una escritura de Sancho el de Peñalén. "illam ecclesiam quae dicitur Sancra Maria de Abeka"
Como esta iglesia tenía ya propiedades y era parroquia, es de suponer que la llegada de la imagen de la Virgen de la Vega a la villa, fuese bastante anterior, pocos años después de la conquista de 923.
La actual talla puede ser de finales del siglo XIII, conbinando elementos de estilo romanico y gotico.
En 1388 Alvar López de Puelles, vecino de Haro, fundó una capellanía para la Vega.
Hacia finales del siglo XIV o principios de XV la talla debio sufrir una reparación policroma, posiblemente para marcar la original.
En 1424 pasó por Haro Blanca I de Navarra, la esposa del rey Juan el Grande, con su hijo Carlos. Estuvieron en la villa del 8 al 12 de septiembre, lo que hace pensar que en aquella época se celebrase ya en Haro la festividad de la Virgen de la Vega.
Hacia 1492 se supone que se vistió la imagen por vez primera. Un privilegio otorgado por los reyes catolicos a los Condes de Haro, por su participación en la reciente guerra de Granada, habria permitido la colocación de una granada sobre la mano de la talla vestida con manto. Esto supuso una segunda intervención, muy desacertada, realizada para encajar la corona metálica y adecuar la imagen a la ropa de vestir. En ella perdió la imagen: el cabello, la toca y acaso también una primitiva corona. Hasta las puntas de los zapatos fueron recortadas al sobresalir mucho y empujar el manto en demasía.
Por último una tercera modificación de la talla se produjo en 1967, al quitar los ropajes que cubrían la talla desde 1492. Se hizo entonces necesaria la reparación de los destrozos ocasionados para cubrirla con ropajes, cepillando o arrancando elementos constituyentes de la primitiva talla, además de las roturas y desperfectos ocasionadas por el tiempo. A efectos de reconstrucción se tuvo en cuenta un tocado como el de la Anunciación en piedra de Silos o como el de la Virgen Blanca de León a fin de poder presentar la imagen sin vestiduras textiles y sin corona. Fue el 30 de diciembre de 1967 tras casi quinientos años escondida bajo su manto, despues de una celebración multitudinaria presidida por autoridades locales y regionales, se descubrio la antigua talla gotica. El motivo fue las disposiciones dadas en el concilio Vaticano II para que los templos y las imagenes recuperaran su antigua sobriedad y sencillez, quitando de los templos e imagenes los muchos aditivos extraordinarios de que habian sido provistos. Asi pues, esa tarde del 30 de diciembre de 1967, fue presentada la reforma realizada tanto en la imagen como en el propio templo. Tras la misa oficiada por el entonces Obispo de la Diocesis D. Abilio del Campo y de la Barcena, el Párroco de Haro y Capellán de la Basilica D. Jose Luis Olarte Espeso y el joven misacantano D. Jesús Orue, se permitio al curioso publico asistente contemplar la magnifica escultura de la virgen tal como fue realizada y venerada por nuestros antepasados en los siglos XIII, XIV y XV. La polémica surgio de inmediato, entre quienes querian que siguiera la virgen que habian conocido durante toda su vida y los que veian con buenos ojos la, para todos,nueva imegen de la Patrona de Haro. Todo se solucionó de modo salomónico, permitiendo que durante unas fechas señaladas al año se vistiera a la virgen con sus mantos de siempre.